lunes, 12 de octubre de 2015

Una más

Las 10:30 h. de la mañana de un sábado, sábado de compras. Salimos de casa corriendo porque ya no es la hora que nos habíamos propuesto y seguro que no nos da tiempo a comprar todo lo que teníamos pensado.

Mi madre, mi hermana, mi dulce detectora y yo. Primera parada, nos tomamos un café para coger fuerzas y Cini da el primer aviso del día en 198. Así que me tomo el café con sacarina y estoy pendiente por si me toca corregir. Entramos en la primera tienda y da el segundo, tercero, cuarto... ladrido, no para, está nerviosísima. Sólo han pasado 15 minutos y estoy en 115. Un batido, una galleta, premio a Cini y seguimos de tienda en tienda.

En la tercera vuelve a avisar, me mido y 83, increíble. Salimos de la tienda vamos a una terraza me pido un zumo, me como 3 galletas y volvemos a la carga. Dos tiendas más tarde vuelve a avisar, vaya, parece que me he pasado con las medidas... 241.

Corrijo un poco, vamos a otra tienda y a comer. Todo bien hasta las 17:00 h., Cini vuelve a avisarme de que algo no va bien, compruebo y 123. Tomo 1 ración y continuamos, con unas ganas de acabar inimaginables...

El resto de la tarde estable, cansada de andar, pero con la glucosa en su sitio. Llegamos a casa y, claro, marcaje. Me mido 95, me tomo medio zumo y ceno. 

Estamos cansadísimas, así que pronto a dormir porque al día siguiente tenemos charla en Vitoria, también será un día movido... Pongo la alarma a las 3.00 h., pero no llega a sonar, Cini me despierta a las 2:15 h. para que me mida y me tome un batido. Desactivo la alarma de las 3.00h. y a dormir hasta las 7:00h, Cini se encarga de avisarme si vuelve a bajar.

lunes, 27 de julio de 2015

marcajes y MARCAJES

Me mira, se sienta y ladra, espera pacientemente a que me mida la glucosa y, sino lo hago, ladra un montón de veces más. Hasta que la llamo pesada, compruebo mis niveles, miro hacia abajo y la veo sentada moviendo su cola. Entonces no me queda otra que darle la razón, premiarle y actuar para evitar la hipo o hiper que se acerca.

Lo hace una media de 9 veces al día, por lo que se puede decir que me he acostumbrado a su ladrido y he mecanizado que después de éste venga la glucemia, su premio, las medidas preventivas y continuar con lo que estaba haciendo. Pero otras muchas veces, ese ladrido hace que me pare a pensar y me pregunté qué habría pasado si ella no hubiera estado ahí en ese momento... Resumo una de esas situaciones, para que se entienda mejor:

Llego a casa sobre las 21:00, me pongo el pijama, me siento en el sofá y Cini marca. Así que compruebo mi glucosa y estoy en 109 (después de todo un día lleno de hipos, todo apuntaba a que Cini avisaba de otra más), por lo que decidido adelantar la cena. Empiezo a comerme el bocadillo y Cini sigue marcando sin parar, le doy otro premio, le acaricio y sigue marcando. Continuo cenando hasta completar las 7 raciones de la cena, sin ponerme el bolus, haciendo caso al incansable aviso de Cini. Mi madre me dice que si Cini no para de marcarme, debería pincharme otra vez, las llamo pesadas a las dos, y al levantarme a por el glucómetro empiezo a oír muy raro y a ver muy borroso. Mi madre me lo acerca, me mido y... ¡47! No me lo puedo creer, después de haber comido 7 raciones (pan y fruta), sin insulina, sigo bajando... Tomo zumo con azúcar y a los 10 minutos Cini para de ladrar, compruebo un poco después, 98, todo bajo control.

Y en situaciones como ésta viene la pregunta, ¿Qué hubiera pasado sin ese aviso de Cini? En 109 habría esperado a mis padres para cenar, me habría puesto la insulina y hubiera comenzado con el bocadillo... Prefiero no imaginar cómo hubiera acabado la noche.

Una vez más, ¡punto para Cini!

martes, 14 de julio de 2015

Vacaciones 2015 - Boltaña

Cini me acompaña a diario, estamos juntas todo el día y toda la noche. Las vacaciones no iban a ser menos. La pequeña Jack nos acompañó a Jaime y a mí a Boltaña, 5 días en el Pirineo descansando y desconectando de todo.

Mi dulce detectora me cuidó tan bien como lo hace en Zaragoza, no extrañó para nada la rutina y siguió avisando de todas mis tendencias a las hipo y las hiper de día y de noche.

Posó para un millón de fotos, porque Jaime la saca siempre preciosa, y corrió por los caminos como una cachorrita. 

Llegábamos super cansados por la noche, pero eso no le impedía hacer guardia por si algo iba mal. La primera noche me despertó a las 2:00, justo a tiempo para cambiar el catéter que se había obstruido, evitando que me levantara demasiado alta y con cuerpos cetónicos. 96 en ayunas, perfecta actuación tras un aviso perfecto.

En el coche, de paseo por el pueblo, en las siestas, en la ducha, en la terraza de los bares... No hay lugar en el que Cini no trabaje. Me mira, mueve su cola con una felicidad increíble, se sienta y ladra.

Te portaste de maravilla pequeña, compartiremos muchas vacaciones más porque han sido perfectas y tú, además, las has hecho seguras.

Dejo por aquí algunas fotos de estos días

sábado, 20 de junio de 2015

Dos años juntas

Junio 2013
El día 14 de junio hizo dos años de la llegada de Cini a casa. La dulce detectora nos demostró que sería muy importante para mí desde que nos vimos, pero creo que antes de empezar con el adiestramiento, no podía imaginar que juntas pudieramos conseguir tanto.

Hace ya mucho tiempo que a Cini no se le escapa ni una sola de mis tendencias, mucho tiempo que me despierta a mitad de noche cuando algo va mal y mucho tiempo que no veo una cifra más baja de 80 ni más alta de 300.

Hace ya mucho tiempo desde que Cini empezó a hacer este camino más llevadero. Esto no quiere decir que Cini haya dejado de sorprenderme, lo sigue haciendo casi a diario, cuando estoy trabjando en el laboratorio de CANEM mientras ella juega con perros en otra sala y alguno de los compañeros viene a avisarme de que Cini me está marcando desde la otra sala, con la puerta cerrada. Increíble, pero cierto. 

Sigue sorprendiéndome cuando hacemos viajes de 6 horas en coche y ella se despierta en su transportín para marcarme a mitad de viaje; cuando me estoy duchando y veo su hocico pegado a la mampara de la ducha y emite un aviso de "sal, corre, que vas para arriba... o para abajo".

Cada día estamos más unidas, cada día se hace más difícil pasar un rato separadas. Me parece una locura pasar una noche sin ella, porque ha sido quien ha conseguido que pueda dormir 8 horas seguidas sabiendo que no serán los síntomas de una hipo o una hiper los que me despierten.

Esta pequeñita ha conseguido que la Betty deje de ganar batallas, hace ya mucho tiempo que las que ganamos somos nosotras...

Junio 2015

sábado, 4 de abril de 2015

Cada marcaje, la misma ilusión que el primero

Pasan los días y los meses como equipo, y ya van camino de los dos años. Pero el tiempo no hace sino incrementar la ilusión de cada marcaje, cada vez son más las hipos e hiper que me evito hasta el punto de ser cero cuando paso contigo los días completos.

El tiempo sólo hace que seamos más inseparables, que confíe más en ti y que cada marcaje sea más especial que el anterior. Es más especial porque nos entendemos un poquito más con cada ladrido, porque las medidas preventivas puestas por mi parte después de cada una de tus alertas son cada vez más apropiadas. Todo esto tiene una traducción muy sencilla al día a día, el autocontrol mejor llevado, más fácil de lograr.

A pesar de que tus avisos ya forman parte de mi día a día desde hace mucho tiempo, no deja de sorprenderme, no dejas de emocionarme. Sigo despertándome sobresaltada a las tantas de la mañana cuando emites uno de tus ladridos pero enormemente agradecia, pues cada uno de ellos supone un susto menos, un despertar en hipo o en hiper menos, otra noche bajo control.

Creo que se me quedan cortas las palabras desde hace tiempo para describir como nos comprendemos, cuanto me ayudas y cuanto te quiero. 

Una vez más, gracias Cini, por estar, por oler, por avisarme y por ayudarme a ganar tantas batallas a la diabetes que antes de tu llegada se presentaban de manera inadvertida. 

Cada día somos más, más equipos de dulces detectores con sus pequeños y no tan pequeños dueños que como tú y yo están adelantándose a los sube y baja de esta caprichosa compañera de viaje. 


sábado, 21 de febrero de 2015

Artículo y vídeo de Las Provincias sobre el Diabetes Experience Day 2015

"Durante toda la jornada del sábado se celebró el Diabetes Experience Day, un encuentro a nivel nacional que reunió a una veintena de expertos en el tema. Uno a uno investigadores y enfermos fueron relatando sus experiencias ante más de un millar de espectadores.

“Esto es una reunión para seguir formando a la gente más allá de las consultas médicas, porque entendemos que este tipo de formación es más interesante y, sobre todo, pretendemos darle voz a la diabetes”, explicó Ángel Ramírez, organizador del evento.

“Los datos dicen que en España hay 5 millones de personas con diabetes, y en la Comunidad Valenciana, 500.000; la mitad de estas personas no saben ni siquiera que tienen diabetes; si no se asume la enfermedad, es muy difícil ponerle freno o controlarla”, destacó Ramírez.

De hecho, durante el encuentro Canaldiabetes.com publicó los resultados de una encuesta sobre los hábitos de vida, formación en diabetes, tratamiento y realidad social de la diabetes. La principal conclusión fue que el 45% de los encuestados no tenía educador en diabetes, lo cual “repercute negativamente en el mal conocimiento y por tanto peor control de su enfermedad”, señaló Ángel Ramírez.

Experiencias vitales

Además de las intervenciones de doctores y científicos, uno de los mayores atractivos del encuentro fueron las historias que compartieron algunos enfermos de diabetes. Es el caso de Josu Feijoo, de Vitoria, que está a punto de convertirse en el primer diabético que viaja al espacio.

“Lo único que tengo que hacer es asumir que mi diabetes es una compañera de viaje; la centrifugadora, los vuelos en aviones de combate para simular maniobras orbitales, cuando me pongo el traje de 135 kilos para simular ingravidez… ahí no puedo ir diciendo que soy diabético; las pruebas son las mismas para todos”, relató Feijoo. “Los posibles problemas que pueda tener como diabético, lo que hago es ensayarlo muchas veces en tierra”, añadió.

Otro ejemplo es el del murciano Antonio Lledó, que se convirtió en el primer diabético en completar la Titan Desert, una competición de bicicleta de montaña de 700 kilómetros por el desierto de Marruecos. “Con 18 años me dijeron que debía dejar de hacer deporte, y lo transformé en un acto de rebeldía”, explicó. “El mensaje que quiero transmitir es que el deporte debe ser parte del tratamiento de una persona con diabetes”, añadió Lledó.

Pero quien más caló entre el público mayor y juvenil fueron Lidia Nicuesa y su perrita. Esta joven de Zaragoza, diabética, controla su enfermedad gracias a su perra, que le avisa siempre -con o sin sonido, dependiendo de cómo lo quiera la dueña- minutos antes de sufrir una hipoglucemia.

“El poder adelantarte a los desniveles es algo que, en primer lugar, te da mucha información para el día a día; además, te da mucha tranquilidad y autonomía, tanto a ti como a los que tienes cerca, que saben que siempre vas a estar consciente para tomar las medidas”, destacó Lidia.

“Y por las noches, aunque tengas que levantarte a las tres de la mañana como todos tenemos pautado, tú sabes que ella va a estar pendiente de ti y si algo va mal te va a despertar; eso da muchísima tranquilidad”, relató esta joven de Zaragoza"

Dejo por aquí el enlace al vídeo 

Diabetes Experience Day 2015

El pasado día 14 de febrero se celebró en Valencia el segundo encuentro nacional de personas con diabetes, el Diabetes Experience Day 2015. Estuve como ponente en el evento con Cini, y fue una experiencia increíble. 

Que todo saliera bien no fue mera casualidad y es que, por un lado, la organización del evento estaba cuidada al detalle y, por otro, la acogida por parte de los asistentes fue excepcional

Los nervios antes de salir al escenario fueron difíciles de controlar y, a pesar de los avisos que venía dando Cini desde las 7:00 a.m., la hiper fue inevitable. Durante la ponencia, los nervios fueron a menos y el objetivo de transmitir todo lo que siento hacia Cini y los grandes beneficios que me aporta en el control diario de mi diabetes se fue cumpliendo. La pequeña se portó muy bien durante todo el día pero, en especial, encima del escenario.

En cuanto tenga la ponencia la subiré en una nueva entrada, de momento me gustaría dejar por escrito la frase que considero el eje central de la misma, ya que, aunque a menudo lo escribo en las entradas del blog creo que es fundamental para comprender la gran función de un perro de alerta médica

"Cini es tan fiable como lo sea mi aparato y tan útil como amplia mi educación diabetológica. Es siemplemente genial y fiable porque mi glucómetro, Cini y yo somos un equipo"

Durante todas las ponencias del día se fueron cumpliendo los 5 grandes objetivos del evento: Educar, impactar, difundir, consolidar e implicar en la diabetes; y con ello se dio voz a la diabetes. Haber podido formar parte de ese gran día y compartir escenario con tantas personas que dan mucho por la diabetes fue una de esas preciosas experiencias que la diabetes deja de vez en cuadno en mi vida.

Dejo por aquí el enlace al reportaje de las noticias de TVE del día del evento (14/02/2015)