miércoles, 22 de octubre de 2014

Ahora te cuido yo

Somos un equipo decía en la entrada anterior... Y así es, pero Cini me cuida mucho más de lo que yo le podré devolver nunca. Está claro que soy yo la que toma las medidas, pero cuando sus avisos faltan... No hay medidas que tomar, los bajones y las subidas llegan sin avisar.

Y hoy han faltado. mi pequeña está un par de días "de baja", hoy la han vaciado. Una operación sencilla, se ha recuperado sin problemas de la anestesia y aquí la tengo todavía con cara de pena y reclamando mimos. Así es, esta perrita ha recibido hoy una cantidad de mimos increíbles. ¿No los merece? Merece todos los del mundo, porque no hay día que ella no me regale un buen control de mi diabetes, no hay día que no me mire con esos ojillos y me diga sin decir nada "venga va, pinchate que yo sé que estás mal" y no hay día que no me alegre desde que me despierto con un millón de lametones. Pues hoy te cuido yo.

Está muy bien, ya anda, aunque todavía está adormilada y flojita pero todo dentro de la normalidad. Seguro que ella en un par de días está deseando volver a los marcajes, porque en cuanto le han enseñado en el veterinario su arnés de perrita de asistencia de Canem antes de que yo llegará se ha puesto a mover la cola muy rápido, es preciosa y encantadora.

Aquí os dejo una foto de lo mimadísima que la he tenido desde que ha llegado a casa.

En unos muy pocos días volvemos con batallas ganadas en equipo a la tía Betty...

martes, 21 de octubre de 2014

Fiable

Pero, ¿y eso es fiable?
Cuantas veces habré escuchado la misma pregunta en un año... Y siempre respondo encantada: Lo es.
Los avisos de mi perrita son fiables porque somos un equipo. Ella avisa en ese momento exacto en el que la glucemia es necesaria, y yo me la miro para tomar las medidas. Por eso es fiable, porque no me dice qué tengo que hacer sino cuando lo tengo que hacer.
Parece una tontería, pero no lo es. Me he pinchado innecesariamente mis deditos muchísimas veces en 14 años, se agradece evitarse esos controles que no aportan información. Cini me avisa y me dice “ahora, midete" o, por el contrario “no seas pesada que estás bien, no hace falta que te midas". No es una tontería, evitar pinchazos innecesarios o saltarse alguno imprescindible pueden ser la clave de un control perfecto.
Por tanto, ¿como de fiable es Cini? Muchísimo, siempre que tengamos muy claro que no es un glucómetro, es un perro de alerta médica cuya función es chivarme el momento de usar un glucómetro. Sin duda, las mediciones básicas no hay quien las evite... Cini está ahí para los sustos y, también, para esos momentos en los que el glucómetro y yo entramos en discusión porque “yo me encuentro mal".
Es simplemente genial y fiable, porque mi princesa, mi glucómetro y yo somos un equipo.

domingo, 19 de octubre de 2014

Volvemos a las horas de libros

Aquí estamos, después de un inicio de curso progresivo (porque hasta después de pilares he de reconocer que poquito hemos estudiado) volvemos a los libros.
La peque se acordaba mucho mejor que yo de como va el tema, y en cuanto he extendido su manta en el escritorio se ha subido de un salto a la cama y de otro a la mesa, se ha tumbado en su hueco y se me ha quedado mirando moviendo la cola con su cara de “y ahora yo ya se que viene el premio"...
Es una compañera genial, aunque se me va durmiendo poco a poco en cuanto le llega al olfato algo que no va bien se levanta a marcar sin perder un segundo.
A ver si para la próxima entrada puedo subir el último reportaje que nos grabaron!!
Dejo por aquí un par de fotos, del inicio del estudio y al cuarto de hora de empezar. Anda que no sabe...

jueves, 16 de octubre de 2014

Momentos en los que me la como a besos

Estar tumbada en la cama tan tranquila mirando el movil y sentir sus patitas por encima de la pierna mientras trepa hasta donde tengo la cara y las manos, acerca su hociquito, se va a los pies de la cama y se pone a ladrarme para avisarme de que me mida y cene ya porque la cosa va para abajo es una de esas sensaciones que no se pagan con nada...
Y en ese momento me mido, la miro y no puedo evitar comérmela a besos.


domingo, 5 de octubre de 2014

Mucho, mucho amor

El olfato de Cini es un privilegio, me da una información increíble para controlar mis niveles. Pero, ¿que hay de esos cuidados que no le hemos enseñado?

Mi princesa sabe hacerse el muerto, dar la pata, sentarse, tumbarse, ladrar, colocarse bajo mis piernas para no molestar en la calle o las tiendas, marcar hipo e hiperglucemias, ladrar al oír una alarma de la bomba... Y medio millón de cosas más que le enseñamos a diario porque me encanta verla aprender y ambas nos divertimos mucho aprendiendo cada truco. Pero hay cosas que nunca le he enseñado, cosas por las que no la he premiado y que me dejan asombrada cada vez que compruebo que las repite porque quiere, como si fueran una rutina.

De todas estas cosas hay dos que me sorprenden mucho, la primera es la calma y cariño con la que se acurruca sobre mis piernas tras marcar una hipo o hiper, es como si me quisiera transmitir que ya está que una vez que he tomado las medidas solo me queda acariciarla y esperar porque todo va a volver a la normalidad en un plis gracias a sus anticipados avisos; y la segunda es la concentración y tranquilidad con la que se sienta detrás de mí mientras preparo mi cambio de catéter, no se mueve y no se acerca al cambio pero tampoco se separa de mí ni un segundo.

He de reconocer que en las dos situaciones tiendo a ponerme nerviosa... Pero no doy crédito a como se comporta. Desde luego su labor como olfatillo de hipos e hiper no tiene precio, pero su comportamiento de mimos y tranquilidad ante situaciones que a mi me ponen nerviosa no se queda nada atrás.

Lo dicho en entradas anteriores, cada día somos más inseparables...

Os dejo unas fotillos de como me mima la peque en estos casos, ¡¡para comersela!!